Historia y evolución
La Plaza de la Señoría, situada en la parte alta del casco antiguo de Benidorm, es uno de los rincones más emblemáticos y antiguos de la ciudad. Sus orígenes se remontan a la Edad Media, cuando frente a la pequeña iglesia original se erigía este espacio abierto junto al acantilado sobre el mar.
A lo largo de los siglos, la plaza ha sido testigo de acontecimientos dramáticos, como los ataques de corsarios en el siglo XV que dejaron la zona prácticamente despoblada, y de su posterior repoblación en el siglo XVII, impulsada por Beatriz Fajardo en 1666. A mediados del siglo XVIII se construyó la iglesia actual de San Jaime y Santa Ana, y con ello se derribó la medieval, ampliándose la plaza paulatinamente.
Durante las décadas posteriores, la plaza se transformó: en la década de 1940 se levantaron las primeras barandillas de protección, y en 1960 se inauguró la fuente pública que sanearía la histórica escasez de agua potable en Benidorm.
Características destacadas
- Forma y entorno: Tiene una configuración trapezoidal (casi triangular), flanqueada por la iglesia de San Jaime y Santa Ana en el sur y una balaustrada hacia el acantilado en el oeste.
- Elementos patrimoniales: Alberga la fuente histórica de agua potable y el monumento “Als morts en la mar”, en memoria de los pescadores y marineros fallecidos en el mar.
- Vistas: Desde sus balcones se vislumbra una panorámica espectacular de la playa de Poniente y de la bahía, haciendo de la plaza uno de los miradores más apreciados del casco antiguo.
- Accesos: Una escalinata desde la plaza baja hasta la roca y la antigua playa del Mal Pas, conectando con el pintoresco Puerto Deportivo y el paseo del espigón.
Atractivos turísticos cercanos
La plaza está rodeada de puntos de interés históricos y culturales:
- Iglesia de San Jaime y Santa Ana: Edificada entre 1740 y 1780, se abre a tres plazas, incluida la de la Señoría, y destaca por su torre neoclásica y su cúpula característica.
- Plaza del Castillo y Mirador del Castillo: A pocos pasos, con restos de cañones y vistas en 360°, rememora la antigua fortaleza medieval que defendía la ciudad.
- Puerto Deportivo y paseo del faro: Accesible por las escaleras desde la plaza, ofrece un agradable paseo marítimo con vistas al mar y a la isla de Benidorm.
- Calles del Casco Antiguo: Como las de Sant Vicent, Sant Llorenç o Alacant, que descienden desde la plaza y están repletas de tiendas, bares y rincones con encanto.
El Rumbo: un ícono británico desde 1971
A escasos 20 metros de la plaza se encuentra El Rumbo, uno de los pubs más míticos en Benidorm. Fundado en 1971, se convirtió en uno de los primeros enclaves de la comunidad británica en la ciudad, cuando el turismo anglosajón comenzaba a consolidarse.
- Ambiente y legado: Referido por locales y visitantes como «uno de los pubs más antiguos de Benidorm», El Rumbo sigue siendo un punto de reunión con su encanto auténtico y su ambiente cálido.
- Ubicación perfecta: Ideal para disfrutar de una pinta tras visitar la Plaza de la Señoría o hacer un paseo por el casco antiguo. Su proximidad le otorga un valor histórico y cultural innegable.
- Servicios modernos y sabrosos: Además, en El Rumbo puedes cargar tu móvil, disfrutar de un sabroso take away meal deal, o refrescarte con su coctelería deliciosa. También ofrece smoothies, toasties y una gran variedad de pinchos perfectos para una comida liviana en un día caluroso, ya sea después de una caminata o una jornada en la playa.
Recorrido recomendado
- Comenzar en la Plaza del Castillo, explorar el mirador y sus cañones históricos.
- Descender por la calle hasta la Plaza de la Señoría y admirar su fuente, monumento y vistas.
- Visitar la iglesia de San Jaime y Santa Ana.
- Bajar la escalera hasta la playa del Mal Pas y el puerto.
- Finalizar con una parada en El Rumbo para una experiencia auténtica y un ambiente lleno de historia compartida británico–benidormense.
La Plaza de la Señoría no solo es un enclave con gran valor histórico y arquitectónico, sino también un punto de encuentro con la esencia tradicional de Benidorm. Su conexión con El Rumbo añade un matiz especial, uniendo pasado y presente en una experiencia urbana, cultural y social difícil de recuperar en otro lugar. ¡Una visita imprescindible rumbo al corazón de Benidorm!
